Tres
personajes se desplazan a través de la rutina, los vicios y la memoria, y se
exponen ante el espectador para que acceda junto a ellos al entorno casero y
cerrado, opresivo, por el que transitan.
La identidad individual pugna frente a lo idílico del dos, la
pareja, y desestabiliza el vínculo aparentemente indisoluble que une a los tres
personajes.
El espacio que comparten está menos sujeto a los ejes temporales
que a la naturaleza de las emociones: acercarse y protegerse significa explorar
el movimiento que los entrelaza en las ramas del pasado, del presente y del
futuro conjunto.
El sacrificio, nuestra identidad personal. Y nos debatimos entre
aceptarlo o no.
Intérpretes: Laura Miralbés, Juan Manuel Ramírez y Joaquín Abella